La música cambia la bioquímica de nuestro cuerpo, y han demostrado que escuchar música influye en la salud de nuestro cuerpo. Esto sucede de cuatro maneras: placer, estrés, sistema inmunológico y agregación social.

Durante mucho tiempo la ciencia moderna ha observado los efectos que un cierto tipo de música y vibraciones tienen sobre el cuerpo y la psique humanos, reconociendo lo que durante siglos sólo ha sido transmitido por una antigua sabiduría holística, a saber, que los sonidos tienen efectos sobre el cuerpo y el cerebro e influyen en el estrés, los estados mentales negativos e incluso la percepción del dolor.

Pero sólo en los últimos años hemos visto verdaderas revoluciones, especialmente en el campo de la biología. La epigenética ha demostrado que ya no somos víctimas de nuestra partitura (el ADN): cada día podemos cambiar la forma en que leemos la partitura, al contrario la interpretamos con la mente y con los estímulos del entorno. La Física Cuántica, al tratar con nuestras células, ya no considera sólo las señales mensurables (alimentos, drogas, elementos materiales) sino también las vibraciones y las emociones que sabíamos que eran importantes pero que no podíamos cuantificar y medir.

A pesar de que durante siglos y siglos la música se ha utilizado para activar procesos de curación en individuos debilitados, el concepto de la música como terapia sólo despegó a principios de la década de 2000, con estudios que demuestran su frecuencia en todo. Hoy en día, cada vez más hospitales y clínicas integran la música en el tratamiento de diversos trastornos y estados patológicos.

Esto significa que estamos conectados a un Todo Universal y que para estar bien tenemos que estar de acuerdo con él. Cuando estamos en resonancia estamos en equilibrio. ¿Pero qué es la resonancia? Es la frecuencia constituida por un rango óptimo de vibraciones. Incluso si con nuestros sentidos podemos percibir sólo una pequeña parte de ella, todo está en un estado de vibración de la más pequeña partícula física.

El estado elemental de vibración es el del sonido, y cada órgano y célula de nuestro cuerpo emite y absorbe el sonido con su frecuencia de resonancia óptima. La música traduce las vibraciones universales que crean un bienestar psicofísico y emocional, promoviendo la homeostasis celular, la armonía y la salud de nuestro cuerpo.

Estudios específicos sobre las vibraciones y su efecto – como los del Dr. Leonard Horowitz, una de las voces más autorizadas en la materia – atestiguan que cuando un instrumento musical se afina a 432 Hz no importa cuán dura sea la música que se toque: las vibraciones, los sonidos armónicos que produce, cuentan. Esta sintonía será beneficiosa para el cuerpo, porque lo hará vibrar en los fractales armónicos en sintonía con la matriz sonora helicoidal del ADN, que representa la vida misma.

Sintonizada con esta frecuencia, la música produce armonías que resuenan con el latido del corazón, la doble hélice del ADN (frecuencia de replicación), la función máxima del cerebro (sincronización bihemisférica), el latido fundamental del planeta (resonancia de Schumann) y la arquitectura musical de la creación.

Esta podría ser la clave para reconectar el micro y macro cosmos y encontrar la secreta y ancestral armonía que nos conecta unos con otros, vibrando en los mismos acordes, al unísono.

Para ser exactos, es la música sintonizada a 432 Hz la que crea la resonancia perfecta en nuestro cuerpo, incluso a nivel emocional y espiritual: ¡los antiguos lo sabían! Hoy en día la música que escuchamos está sintonizada a 440Hz, por lo tanto ligeramente desafinada con respecto a lo que es el lenguaje universal de nuestro cuerpo y la naturaleza.

La música a 432 Hz se considera la afinación natural porque está inspirada en los sonidos de la naturaleza y las vibraciones del Universo. Esta afinación se basa en un La y C matemático – A > 432 Hz / C > 256 Hz, ambos múltiplos de 8 – y se refiere al diapasón científico > de ahí el nombre de afinación científica, también llamada de oro porque las reglas que se siguen para afinar los instrumentos son las de las proporciones de oro.